jueves, 4 de enero de 2024

Luces de Navidad

 


Me puse una piel roja en el cuello porque hacía mucho frío.  Era un día especial, aunque había sido un año de batalla, tensiones y conflictos. Dejé el sufrimiento aparcado y me empeñé en disfrutar.

Estaba precioso. Lleno, amable, relajante, fotogénico. Me hice una foto dentro del bombón y me fijé en la elegancia que me rodeaba. El pueblo de La Alberca había sido elegido como el más luminoso de la Navidad; yo había votado por él y me sentí encantada de celebrar allí su triunfo tomando una de sus célebres tapas: la lolita preñada. Salud y a vivir.